LA CAPITAL
El índice de Precios al Consumidor subió 4,7 por ciento en marzo. Los mayores aumentos de precios fueron en educación e indumentaria, por el inicio de clases. Pero alimentos, un rubro de alta incidencia, subió 6%.
El Indice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó durante marzo el 4,7 por ciento impulsado por las subas de precios del segmento de educación _estacionalmente vinculado al inicio de clases_ pero además por la aceleración en prendas de vestir y en alimentos. Así lo informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el cual detalló que con este incremento la inflación minorista del primer trimestre del año trepó hasta el 11,8 por ciento y acumuló en los últimos doce meses un 54,7 por ciento, el nivel interanual más alto desde enero de 1992.
El salto de marzo es peor de lo esperado por el gobierno y por el sector privado, ya que el último relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que realiza el Banco Central entre agentes del sector financiero ubicaba a la inflación de marzo en 3,8 por ciento, aunque algunas estimaciones posteriores elevaron ese pronóstico.
El presidente Mauricio Macri había admitido el lunes que el indicador mostraría “un pico” inflacionario y reconoció que el combate al flagelo es “más difícil” de lo esperado, aunque confió en poder erradicar el fenómeno.
El salto más grande del IPC de marzo se dio en el segmento de educación, con una suba del 17,9 por ciento respecto del mes anterior y de prendas de vestir y calzado, que evolucionaron 6,6 por ciento, en sintonía con el inicio del ciclo escolar que aceleró los precios de esos productos.
Sin embargo, el impacto más fuerte es el que se registró en el sector alimentos y bebidas que creció 6 por ciento, ya que se trata del de mayor incidencia en el índice general y al mismo tiempo, incidirá en la medición de la pobreza que releva los niveles de ingresos.
Alimentos, por las nubes
De hecho, mientras que en el acumulado del primer trimestre el IPC trepó un 11,8 por ciento, el rubro de alimentos y bebidas lo hizo por encima, con un 15,8 por ciento.
Por otra parte, en la comparación interanual los aumentos de los alimentos fueron superiores al índice general, al sumar un 64 por ciento, entre marzo de 2018 y el mismo mes de este año.
Los datos que ayer difundió el Indec muestran además que la aceleración de precios está lejos de encontrar un freno. Esto queda expuesto en los números de la inflación núcleo _que mide los índices sin tener en cuenta la estacionalidad y permiten conocer una tendencia de mediano y largo plazo_ que para marzo de este año arrojaron un crecimiento del 4,6 por ciento, mientras que los precios regulados como tarifas eléctricas y transporte aumentaron 4,9 por ciento y los bienes y servicios estacionales como educación y prendas de vestir lo hicieron 4,8 por ciento.
Sector por sector, la inflación de marzo estuvo traccionada por un incremento del 17,9 por ciento en educación; 6,6 por ciento en prendas de vestir y calzado y 6 por ciento en alimentos y bebidas. En tanto el sector de comunicación creció un 4,4 por ciento, especialmente por la suba de telefonía móvil; el de restaurantes y hoteles 4,3 por ciento y el de transporte 4,2 por ciento.
Por otra parte, vivienda y servicios básicos aumento 2,8 por ciento; equipamiento y mantenimiento del hogar, 3,8 por ciento; salud 3,2 por ciento; recreación y cultura 2 por ciento y otros bienes y servicios 3,1 por ciento.
El IPC Nacional aumentó 4,7 por ciento en marzo pero la inflación impactó más fuerte en las provincias del norte, en las regiones del NEA y del NOA donde llegó al 5,1 por ciento y 4,9 por ciento respectivamente.
En tanto, la Patagonia tuvo la inflación más baja con el 4,3 por ciento y Cuyo 4,4 por ciento, mientras que en la región Pampeana, que incluye a Santa Fe fue del 4,5 por ciento.
Según el informe que difundió el organismo estadístico en la comparación interanual, los bienes relevados subieron 59,2 por ciento mientras que los servicios crecieron un 47,2 por ciento durante marzo. Como ocurrió en los meses anteriores y desde septiembre del año pasado en adelante, se replica la misma relación que da cuenta del impacto de la devaluación sobre los bienes transables.
Si se analiza la inflación acumulada desde marzo de 2018 al mismo mes de este año, cinco de los doce sectores relevados crecieron por encima. Las subas más importantes la registró transporte, con un incremento del 67,5 por ciento y alimentos, que creció 64 por ciento. Pero también lo hicieron otros bienes y servicios un 59 por ciento; salud un 56 por ciento y el sector de vivienda, agua, electricidad gas y otros combustibles un 55,8 por ciento.
En la región Pampeana donde está incluida Santa Fe, la inflación anualizada llegó al 54,7 por ciento, pero los alimentos crecieron 64,7 por ciento y el transporte 64,4 por ciento.
Discriminados por productos, en el mes de marzo de 2019 los alimentos que más subieron fueron el tomate redondo 31,3 por ciento, el pollo entero un 25,4 por ciento, el queso pategrás y sardo 9,5 por ciento ambos, la leche fresca entera en sachet 9,4 por ciento y el pan de mesa, que aumentó en el mes 8,6 por ciento, según los datos relevados por el Indec.
lo más caro. El rubro educación subió 17,9 por ciento en marzo. En el primer trimestre la inflación general tocó el 11,8 por ciento.