UNO SANTA FE
El PJ y el Frente Progresista se pasaron facturas políticas y los intendentes y presidentes comunales deberán seguir esperando para disponer del 50% de los recursos del FOM para pagar sueldos.
La discusión de este jueves en la Cámara de Diputados parecía encaminarse hacia el debate sobre las cifras y la emergencia económica que están atravesando los municipios y comunas de la provincia. Pero lentamente los cruces fueron subiendo de tono y los legisladores del Frente Progresista y del PJ comenzaron a pasarse todo tipo de facturas políticas. Y el debate casi termina en escándalo cuando un diputado pidió la palabra y se la negaron. Por su parte, los legisladores de Cambiemos fueron espectadores de lujo. En tanto, Carlos Del Frade (FSP), intervino para cuestionar a ambas fuerzas, el oficialismo y la primera minoría de la oposición.
El eje de la cuestión era si se le daba sanción definitiva al proyecto que tuvo media sanción en el Senado para que municipios y comunas puedan disponer del 50% del Fondo de Obras Menores (FOM) para gastos corrientes o si a esa iniciativa se le realizaban modificaciones para sumar a ese reparto de recursos –con una ampliación específica de partidas– a las ciudades de Santa Fe y de Rosario, que hoy no obtienen ese tipo de recursos. Ese punto, hasta el momento, es inaceptable para los senadores justicialistas que son mayoría en la Cámara alta y que volverán a insistir con el proyecto original. Eso llevará algunas semanas más de idas y vueltas entre ambas cámaras.
Por ese motivo, los diputados del PJ entendieron que la movida del Frente Progresista –de incorporar a las dos grandes ciudades– tenía como objetivo, por un lado, dilatar una medida que tiene carácter de urgente para que los intendentes y presidentes comunales puedan pagar sueldos; por otro, acusaron al oficialismo de querer exponerlos ante los santafesinos y rosarinos como los culpables de que ambas ciudades se queden sin esos fondos.
Leandro Busatto (PJ) lamentó que la bancada oficial no entienda el momento que atraviesan los gobiernos locales y anticipó que su bloque votaría en contra del dictamen de mayoría y que votaría por el de minoría que proponía el texto que había sido aprobado hace unas semanas por el Senado. “Eso permitiría que los municipios y comunas dispongan mañana de esos recursos. No dentro de una semana o de 15 días, mañana”, remarcó.
Y su compañero de interbloque, Luis Rubeo, fue incluso más allá y dijo que “detrás del tratamiento de un expediente que habla de obras menores, lo que se está llevando adelante es un nuevo reacomodamiento político” en la provincia. “La bancada oficial lleva adelante un despacho que sabe de antemano que esto no prospera en el Senado”, advirtió el legislador quien mencionó su acompañamiento a la idea de incorporar a Santa Fe y Rosario a ese fondo ya que el Fondo del Conurbano (constituido con recursos nacionales) está congelado y eso las perjudica porque quedó rezagado.
Rubeo apuntó al “sentido de la oportunidad” del Frente Progresista que en los últimos cuatro años fue mayoría en esa cámara pero que recién “a escasos 70 días de dejar de ser gobierno les agarra la urgencia de incorporar a Rosario y Santa Fe” en un tema que tendrá que ser discutido en el proceso de transición entre el gobierno saliente de Miguel Lifschitz y el entrante de Omar Perotti.
“Hay una decisión política de la circunstancial mayoría de hoy de ser oposición. Han adelantado los tiempos. Se convirtieron en legisladores opositores 70 días antes de la finalización del mandato y están sosteniendo posiciones políticas que seguramente van a sostener después del 10 de diciembre“, cuestionó y finalizó su intervención con una chicana al oficialismo amenazando con utilizar la misma herramienta que usó el socialismo el año pasado para pedir una sesión especial donde se discuta la reforma de la Constitución. “Me gustaría que esta cámara, antes que finalice el año, se expidiera”, dijo.
En tanto, Del Frade planteó que en Santa Fe no faltan recursos “lo que falta es la voluntad política de ir a buscar el dinero” y volvió a insistir con la necesidad de una reforma impositiva integral. “Estamos discutiendo sobre la alcancía que nos dan los verdaderos dueños de la provincia“, sostuvo el legislador en referencia a la imposibilidad de avanzar con impuestos que graven a las grandes empresas radicadas en la provincia.
Desde el oficialismo, Fabián Palo Oliver, desmintió que se haya intentado evidenciar que los diputados justicialistas no querían tratar la incorporación de Santa Fe y Rosario al FOM, pero advirtió: “La falta de voluntad política está en el Senado”. En el mismo sentido, Gabriel Real (PDP–FPCyS) les espetó a sus pares del peronismo: “Alguna vez háganse cargo de sus senadores”.
Eso generó la reacción de Héctor Cavallero quien ya había dado su punto de vista, pero que dijo sentirse aludido con las palabras de Real y quiso contestar. El presidente de la Cámara, Antonio Bonfatti, sacó a relucir el reglamento y dijo que sólo podía tener una intervención en el debate. Rubeo pidió un debate abierto y no consiguió los votos necesarios. Por eso Cavallero se quedó hablando solo, sin micrófono. La situación rosó el bochorno.
Una agenda clara
El diputado socialista Joaquín Blanco también se quejó de la actitud de los senadores, que “representan a su departamento, pero que legislan para toda la provincia”. Pidió que no haya santafesinos discriminados y remarcó que uno de cada dos santafesinos viven en Santa Fe o Rosario.
Además aseguró que no hay que resignarse a no poder encontrar un consenso para un debate integral que incluya, por ejemplo, la posibilidad de llevar el Plan Abre a todas las localidades de la provincia y que en ese marco se puede buscar una solución para todos los temas.
Por otra parte, planteó la voluntad política de avanzar en una transición ordenada y se quejó que desde el equipo del gobernador electo se intente avanzar “a los pechazos, con imposiciones y con chicanas” a través de los medios.
“Hay dos transiciones: una institucional, donde hay diálogo. La otra es mediática, donde intentan meter temas que no están en la agenda institucional. Necesitaríamos que Perotti ordene esos temas”, dijo Blanco y se preguntó si es voluntad de Perotti que esta Legislatura trate el presupuesto, si quiere que se vote la adhesión a la ley de emergencia alimentaria que condiciona recursos hasta 2021. Además cuestionó que en la mesa de transición aún no se habló de seguridad.
Los números
A principios de este siglo el Fondo del Conurbano significaban 30 millones de pesos, que en ese momento equivalían a dólares. Esas partidas se dividían en $21 millones para Rosario y $9 millones para Santa Fe. Para compensar al resto de las localidades se creó el FOM, que se componía con el 1% de los recursos provinciales, que por entonces equivalía a $20 millones.
En la actualidad el FOM alcanza los 1.400 millones de pesos, es decir que creció 70 veces. Mientras que el del Conurbano, para Santa Fe y Rosario, sigue congelado en $30 millones. Los diputados del oficialismo dijeron que si hoy fuesen 30 millones de dólares a Rosario le significaría un ingreso de $1.260 millones, mientras que para Santa Fe corresponderían $540 millones. Eso está muy lejos de la realidad.
Para incorporar al FOM a las dos grandes ciudades los legisladores proponen crear nuevas partidas (el 0,4% de los recursos provinciales) para no perjudicar a las ciudades de segunda categoría ni a las comunas. Pero la discusión que viene desde hace años no se va a resolver en los próximos días. Rubeo sinceró que el momento político está reacomodando los posicionamientos políticos, aunque el legislador rosarino solo mencionó los del oficialismo.
A 70 días del cambio de gobierno el Frente Progresista está queriendo garantizar recursos para las dos ciudades más pobladas de la provincia y que justamente gobernarán Emilo Jatón y Pablo Javkin, ambos intendentes electos por el frente que integran socialistas y radicales, entre otros. Pero del otro lado, parece, los legisladores justicialistas ya trabajan como alfiles del futuro oficialismo y empezaron cuidarle la caja a Omar Perotti.