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En la última semana de enero los contagios diarios en promedio bajaron a 15, el número más bajo desde septiembre y menos de la mitad de los casos que se registraron en la primera semana de este año. Médicos, bioquímicos y enfermeros, en ese orden, los que más contagios tuvieron en el sistema de salud. Un 35% del personal sanitario local tuvo problemas relacionados con la salud mental desde el inicio de la pandemia.
El número de contagios diarios de Coronavirus en Rafaela cayó drásticamente durante la segunda mitad de enero, configurando un escenario que contradijo las peores presunciones que se habían registrado a principios de año, cuando los positivos habían trepado de manera alarmante, tras los encuentros sociales propios de las festividades de fin de año.
Luego que en la semana del 10 al 16 de enero se registraran 256 casos totales, con un promedio diario de 37 contagios, y que en las dos semanas previas la progresión marcara un promedio de 25 y 35 casos diarios respectivamente para los períodos entre el 27 de diciembre y el 2 de enero; y entre el 3 y el 9 de enero; los números comenzaron a dar un fuerte indicio de retroceso.
Así, en la semana entre el 17 y el 23 de enero -las estadísticas se hacen considerando la semana de domingo a sábado- hubo 159 casos, con un promedio diario de 23 contagios. Y en la semana del 24 al 30 de enero se registraron 104 casos, con un promedio de 15 positivos diarios. Para encontrar un número tan bajo hay que remitirse a 20 semanas atrás: del 6 al 12 de septiembre, en lo que fue la cuarta semana desde el brote iniciado el 17 de agosto, se registraron en Rafaela 99 casos, con un promedio diario de 14 contagios. A partir de se momento, la progresión siempre estuvo por encima de 19 casos diarios en promedio, con un pico máximo de 735 casos en la última semana de octubre, donde se promediaron 105 positivos diarios sólo en Rafaela. Fue ese el momento de máxima exigencia para el Hospital Jaime Ferré, que en ese momento tuvo colmada su capacidad de internación (70 pacientes en total), tanto en sala general como en las unidades de terapia intensiva, donde llegó a haber 34 pacientes, 29 de ellos con asistencia respiratoria mecánica. Al lunes último, en cambio, el Jaime Ferré tenía 20 internados totales: 9 en sala general y 11 en terapia intensiva, 5 de los cuales tenían asistencia respiratoria mecánica.
Los números configuran un escenario muy positivo respecto a lo que se esperaba cuando se registró el repunte de contagios a fines de diciembre y principios de enero. El peor de los panoramas planteaba la posibilidad de que se llegara a fines de enero con un cuadro de 50 contagios diarios en promedio, lo que pudiera haber puesto en máxima tensión al sistema de salud. Sin embargo, afortunadamente no se dio ese pronóstico pesimista y, en cambio, la reducción de casos configura una tregua saludable a la espera de que se acorten los tiempos de llegada de las vacunas y se comience a inmunizar a la población de mayor riesgo.
En Rafaela vacunaron a 856 trabajadores de salud con la primera dosis
En el departamento Castellanos fueron 1.150, sobre un total de 1.600 en toda la región, incluyendo los departamentos 9 de Julio y Tostado.
La situación del personal
Ayer, el director del Jaime Ferré, Dr. Diego Lanzotti, señaló que “la baja de casos hace 15 días que está en el reporte. Hoy en el Hospital hay 20 pacientes internados en Covid, la mitad en terapia intermedia y el resto en terapia intensiva”, apuntó.
Sobre las consecuencias de la pandemia en el personal de salud, Lanzotti advirtió que “la enfermedad Covid le deja secuelas severas. Tenemos un 38% del personal con trastornos de salud mental, y un 25% con trastornos de salud física. Eso significa que vamos a tener un menor rendimiento de ese personal a futuro, si necesitamos aumentar la capacidad del Hospital nuevamente. Es fundamental que se sigan respetando los protocolos y la población continúe cuidándose. Tenemos las salas preparadas, oxígeno para atender la demanda, comprendemos mejor los mecanismos de acción del virus y contamos con un montón de elementos que nos hacen estar mejor preparados, pero el personal de salud sufrió mucho todo lo ocurrido. El personal de salud no es el mismo de hace un año, por todo lo vivido. Creo que la respuesta no sería la misma si llegáramos a tener un pico como el de fines de octubre”.
También reveló otros datos sobre cómo impactó la pandemia en el personal, en este caso a través de los contagios. “Tenemos nuestra propia estadística. De los agrupamientos que han sufrido contagios, en primer lugar están los médicos, luego los bioquímicos y en tercer lugar los enfermeros. Esto significa que los enfermeros son los que mejor se han cuidado. Los contagios intranosocomiales (los que se producen dentro de los efectores de salud), por contactos con pacientes, soy muy bajos. La mayoría de los contagios se da por contactos sociales. Esto quiere decir que no podemos atribuirle los contagios a la tarea propiamente dicha, más allá de que el personal siempre está en riesgo al trabajar con pacientes Covid”.
