El músico admitió que asesinó a Cristian Díaz, ayer en Villa Lugano. “Cualquier animal hubiera hecho lo mismo”, justificó
Con la misma campera con la que se lo fotografió durante la madrugada de ayer en y con una frialdad que estremece, el cantante Cristian “Pity” Álvarez confesó el crimen de Cristian Díaz minutos antes de entregarse en la comisaría de Villa Lugano.
“Yo disparé, lo maté, era entre él o yo, cualquier animal hubiera hecho lo mismo“, dijo el líder de la banda Viejas Locas.
Estas declaraciones, que no tienen valor legal porque fueron realizadas ante periodistas y no ante las autoridades judiciales, podrían adelantar la estrategia legal de su defensa: llevar el caso a un escenario de una pelea entre dos personas.
Con gorra de lana azul oscuro, lentes de sol blancos y una bolsa papel madera en sus manos, Álvarez llegó a la comisaría 12 de Villa Lugano acompañado por su abogado, donde se lo esperaba desde esta madrugada.
“No vengo a declarar, vengo a contar lo que pasó. Lo maté porque si no me iba a matar él”, insistió el rockero.