Acariciar a un perro ayuda a combatir el estrés y la ansiedad

Acariciar al perro no es solo una manera de demostrar amor hacia nuestros pichichos: también podría ayudar a mejorar la salud. Así lo revela un estudio realizado por la Universidad Estatal de Washington, en el que los especialistas encontraron que acariciar a la mascota de forma regular se convierte en una terapia que puede reducir la ansiedad y el estrés.

Esta no es la primera investigación que comprueba los beneficios de acariciar a un perrito, ya que existe un gran número de estudios previos que confirman que ese gesto genera estabilidad psicológica en las personas.

Sin embargo, el estudio de Washington confirmó que además de incidir en los niveles de estrés y ansiedad, también repercute positivamente en los estudiantes.

Al realizar varias observaciones, se concluyó que acariciar un perro frecuentemente elimina el estrés en un estudiante y mejora su nivel cognitivo.

En el experimento participaron 309 estudiantes estresados, quienes tuvieron que completar un programa de cuatro semanas con terapia animal. La terapia consistía en acariciar un perro durante un corto periodo de tiempo a lo largo de tres años.

Durante este periodo, los investigadores midieron el “funcionamiento ejecutivo de los estudiantes”, el cual engloba la habilidad que tiene una persona para planificar, organizar, concentrarse, memorizar hechos y motivarse

Una experta en interacción entre humanos y animales y profesora de la Universidad Estatal de Washington explicó que este descubrimiento es un hallazgo poderoso. La especialista indicó que se muestra que los enfoques tradicionales de manejo del estrés no son tan efectivos para esta población como los programas que se enfocan en brindar oportunidades para interactuar con perros de terapia.

Además, indicó que “las universidades están haciendo un gran trabajo tratando de ayudar a los estudiantes a tener éxito académicamente, enfocándose en aquellos que pueden estar en riesgo debido a un historial de problemas de salud mental”.