Una versión preliminar indicaba que la víctima habría sido ultimada de al menos tres o cuatro disparos mientras cuidaba a sus hijos pequeños. En el lugar reinaba la conmoción porque mientras trabajaban los detectives de la AIC llegaban más familiares de la víctima, consternados por lo ocurrido.
El lugar donde ocurrió el homicidio es una vivienda humilde ubicada en un pasaje irregular situado en Necochea entre Gálvez y Virasoro, a pocos metros de las vías del ferrocarril. Las primeras informaciones señalaban que el asesinato se produjo cuando la víctima estaba con sus hijos.
Las versiones recogidas en el lugar del hecho por el móvil de LT8 señalaban que dos hombres habrían llegado hasta ese lugar, presumiblemente en moto, y que uno de ellos se introdujo en la vivienda y avanzó sobre la víctima para ultimarla a balazos en la cara. Según esa misma versión, el crimen ocurrió prácticamente delante de los niños quienes tras los disparos salieron corriendo a la calle para pedir auxilio.
En el lugar actuaban efectivos de la AIC con la intervención de la fiscal Gisela Paolicelli.