Jésica Riquelme ingresó al mediodía del sábado al hospital Justo José de Urquiza sin signos vitales y con un fuerte golpe en la cara y la cabeza que, después se constató, le había provocado la muerte. Allí se le practicó una cesárea de urgencia, en la que nació una beba prematura que fue derivada al Hospital Masvernat de la ciudad de Concordia y se encuentra internada en estado crítico.
Ante la sospecha de que se trataba de un femicidio, la Policía confirmó que su ex pareja, Jesús Sánchez, de 38 años -y quien había llevado junto a un vecino a la víctima al hospital diciendo que se había caído- tenía una restricción perimetral tras una denuncia por violencia de género a fines de 2018. Ambos tenían un hijo de 3 y otro de 5 años que quedaron a cargo de sus abuelos maternos.
Tras un allanamiento en su casa del barrio Salto de la misma localidad entrerriana, donde los investigadores secuestraron un martillo y ropa con manchas de sangre que están siendo peritados, Sánchez fue detenido e imputado de homicidio doblemente calificado por el vínculo y violencia de género, según informó el diario Uno de Entre Ríos. También se lo acusa de desobediencia judicial por haber violado la restricción perimetral.
Los médicos de Neonatología del hospital Masvernart de Concordia informaron también respecto a la salud de la beba que se están tomando “todas las medidas necesarias para que salga adelante del estado crítico y reservado en el que se encuentra”.