Si no hay sorpresas de último momento, en las próximas horas se firmará el acuerdo entre las autoridades de Aerolíneas Argentinas y dirigentes de los gremios aeronáuticos. Poco después de las 21 de este lunes, ambas partes iban a comenzar el proceso de revisiones y rúbricas de las actas que plasmarán los consensos alcanzados luego de tres intensas jornadas de negociaciones.
Pasada la medianoche, la cumbre entre los representantes de la empresa y de los gremios continuaba en Aeroparque. En ese marco, desde APLA comunicaron que las negociaciones “seguramente seguirán hasta altas horas de la noche”.
Entre los cambios en los convenios que se analizaron figuran, entre otros, la renuncia a los pasajes en clase ejecutiva para los pilotos y sus familias, el replanteo del servicio de remises para que pilotos y tripulantes de cabina se trasladen entre sus casas y los aeropuertos, y viceversa, y la hora de tiempo de servicio desde que se suben a los autos que los trasladan hasta que comienzan a trabajar en forma efectiva.

Las negociaciones están centradas justamente en lo que pidió Javier Milei: que los gremialistas “acepten discutir los convenios colectivos y eliminen los beneficios” que tienen los empleados de la compañía estatal. Sin embargo, fuentes sindicales advirtieron que todavía siguen estando lejos las posiciones en materia salarial. Los 3 gremios reclaman un 35% de aumento para destrabar el conflicto y seguir conversando más adelante una recomposición más profunda, mientras que la empresa no se apartaba hasta ahora de una oferta del 14% de mejora para el período junio-agosto.
“En el hipotético caso de haber acuerdo, el mismo será informado y aceptado en las asambleas respectivas a las que convocaremos de manera urgente”, insistieron. y cerraron: “Una vez más, la unidad, la solidaridad y el compromiso se muestran como valores fundamentales para alcanzar el objetivo tras un largo conflicto originado en un legítimo reclamo, donde cada acción individual contribuyó positivamente para llegar a esta instancia de manera colectiva”, agregaron en sus redes sociales.
De esta manera, los sindicatos y los representantes de las empresas avanzaban en la firma de las actas para poner en papel los principales puntos que llevarían a un principio de entendimiento. Mientras tanto, tanto el Gobierno como los sindicalistas son prudentes antes de hacer el anuncio oficial
A lo largo de la tarde de este martes, se aceleraron las tratativas para modificar los convenios colectivos de trabajo y buscar un impacto económico en los cambios que permita mejorar la oferta salarial de la empresa, que se mantenía en un 14% para el período junio-agosto.
Tras el cuarto intermedio dispuesto el lunes por la noche, adonde no se pudo llegar a un acuerdo, las autoridades de la compañía estatal volvieron a hablar con los gremios por separado: a las 14 recibieron a la Asociación del Personal Aeronáutico (APA); más tarde, a la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y luego, a la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA).

En la noche del lunes, en una reunión de Aerolíneas y los 3 sindicatos, los puntos consensuados estuvieron a punto de volcarse en una minuta para que quedara un registro de las coincidencias, pero finalmente desistieron de hacerlo y los directivos de la empresa propusieron un cuarto intermedio.
Entre los cambios en los convenios que se analizaron figuran, entre otros, la renuncia a los pasajes en clase ejecutiva para los pilotos y sus familias, el replanteo del servicio de remises para que pilotos y tripulantes de cabina se trasladen entre sus casas y los aeropuertos, y viceversa, y la hora de tiempo de servicio desde que se suben a los autos que los trasladan hasta que comienzan a trabajar en forma efectiva.