Los datos surgen de la Encuesta Mensual Industrial de CAME entre 300 industrias Pymes de todo el país. El Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) se ubicó en 67,4 puntos en agosto.
La mayor flexibilización de la cuarentena, el leve repunte del consumo, y los mayores controles a las importaciones están permitiendo acelerar el proceso de recuperación del sector manufacturero. Igual, las tasas de caídas continúan siendo profundas.
Las industrias trabajaron en agosto con una capacidad instalada de 62,6%, el mayor nivel desde que se instaló la cuarentena.
En los primeros ocho meses del año, la industria pyme acumula una baja anual de 20,8%. Como dato positivo se destaca este mes la suba de Productos de caucho y plástico (+3,3%), cumpliendo dos meses consecutivos en alza de esa actividad.
El rubro con mayor caída anual fue calzado y marroquinería que continuó con caídas muy profundas (-38,1%), mostrando las dificultades que viene teniendo este sector para competir en el mercado local y el consumo postergado. Se destacó el cierre de varias fábricas que en algunos casos se reconvirtieron a otros rubros, y el contar con personal de mayor edad que restringe sus posibilidades de trabajar y obliga al sector a mantenerse con altos niveles de capacidad ociosa.