En el cierre de una jornada intensa que se vivió en los tribunales federales de Comodoro Py, donde varios empresarios, entre ellos Angelo Calcaterra, ex dueño de IECSA y primo del presidente Mauricio Macri, reconocieron que pagaron coimas durante el gobierno kirchnerista, Laura Alonso habló sobre la causa que tiene origen en los cuadernos que anotaba Oscar Centeno, ex chofer de Roberto Baratta.
“¿Cristina recibió bolsos?”, le preguntó en A24 Luis Novaresio a la titular de la Oficina Anticorrupción. Su respuesta: “Por supuesto. Centeno dice que si hubo un duelo duró poco, porque enseguida se retomó el circuito. Y el que siempre lo dijo fue Fariña, que fue el primero en haber aportado mucha información que sirvió”.
“La plata en algún momento va a aparecer”, dijo Alonso. “Alguna se habrá consumido y otra en algún lado está. O está en el circuito financiero internacional y no está a nombre de Cristina Kirchner, o de Néstor Kirchner o de Julio De Vido. Hay que trabajar para rastrear el dinero”, añadió.
La jefa de la OA opinó, además, que los cuadernos de Centeno cuentan “la historia de lo que se venía denunciando desde hace muchos años contada en ocho temporadas y toda de golpe”. “Es la revelación de mucha información junta sobre empresas, empresarios, funcionarios de primer, segundo y tercer nivel sobre un circuito”, destacó.
Para Alonso, el regreso de Cristina Kirchner a la Casa Rosada sería “el horror, una cosa muy trágica, un gran retroceso”. “Creo que no va a pasar, no es una opción. Me gustaría balancear esto: un buen gobierno necesita una buena oposición. Una oposición competitiva le haría bien, y Cristina Kirchner no es competencia, es para fanáticos y le haría mucho daño a la Argentina que ella pudiera tener alguna chance electoral”, abundó. Y remató: “Incluso creo que no debería ser senadora a esta altura de las circunstancias…”.
La funcionaria consideró que la ex Presidente representa “un mal recuerdo de la política”. “Son personas que entraron a la política a robar, no aman a la política. Los que dicen todo el tiempo que aman a la política y al Estado son los peores. Y a la vista están los resultados, los datos, los cuadernos, los bolsos revoleados y los señores contando plata en ‘La Rosadita'”. “El que robó en la política no es político, es delincuente”, concluyó.
LA ENTREVISTA COMPLETA