LA OPINION
Los presidentes del Mercosur festejarán este miércoles el acuerdo alcanzado con la Unión Europea, que creará uno de los mayores mercados del mundo con casi 800 millones de consumidores, durante la cumbre que mantendrán en Santa Fe.
Vigorizado por el pacto anunciado hace dos semanas con Bruselas, el Mercosur quiere llegar el mes próximo a uno similar con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA) y busca cerrar otros con Canadá, Singapur y Corea del Sur.
La cumbre se propone mostrar que empieza “otro Mercosur” y de Santa Fe saldrá el mandato de “flexibilizar” su funcionamiento, reducir la tarifa externa común y eliminar el poder de vetar acuerdos bilaterales que cualquiera de sus miembros quiera alcanzar, según fuentes del bloque. Como otra señal de integración, se eliminará de la región el cobro del “roaming”, una tarifa a las llamadas internacionales desde teléfonos móviles, indicaron las fuentes.
En la mesa estará también la crisis de Venezuela, que fue separada del bloque en 2017. A la cumbre asistirá el presidente de Chile, Sebastián Piñera, cuyo gobierno preside la Alianza del Pacífico, otro pujante bloque comercial, y el presidente de Bolivia, Evo Morales, que busca ser aceptado pronto como socio pleno del bloque.
La administración del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, está “realmente embarcada en un cambio de modelo”, dijo el secretario especial de Comercio Exterior de Brasil, Marcos Troyjo; uno de los negociadores del acuerdo con Bruselas.
“Tuvimos la buena suerte de tener en Argentina al presidente Mauricio Macri, que también quiere que el acuerdo se mueva y con quien también tenemos formas similares de ver los problemas de la región”, añadió.
La asociación de ambos bloques dará paso a un mercado de 780 millones de consumidores que representará una cuarta parte del PIB mundial.
El acuerdo es el mayor alcanzado por la UE con otro bloque y el primero del Mercosur desde su creación en 1991.
Una vez que entre en vigor, se eliminarán gradualmente en hasta 15 años el 91% de los aranceles y tarifas del Mercosur a los productos europeos y la UE hará la propio con el 92% de los suyos en 10 años.
El acuerdo debe ser aprobado por el Parlamento europeo y por cada uno de los 28 países de la UE y los cuatro del Mercosur. El proceso puede llevar al menos un par de años, por lo que en Santa Fe se discutirá si el acuerdo puede irse aplicando parcialmente conforme lo vayan aprobando el Parlamento Europeo y cada Congreso del Mercosur.
Europa enfrenta las fuertes presiones de sectores agrícolas de países como Francia e Irlanda que históricamente han rechazado la competencia del Mercosur.
Además, está pendiente el Brexit que, de concretarse, dejaría a Gran Bretaña fuera del acuerdo con el Mercosur.
En el bloque sudamericano las cosas tampoco son fáciles.
A los recelos de sectores productivos e industrias, se suman las elecciones presidenciales de octubre en Argentina y Uruguay. Los ministros de Producción y Trabajo, Dante Sica, y de Hacienda, Nicolás Dujovne, acompañarán al presidente Mauricio Macri, en las negociaciones que se realizarán en la cumbre presidencial del Mercosur, que deberá formalizar en forma oficial la asociación comercial con la Unión Europea (UE).
Este martes se realizará la reunión del Consejo del Mercado Común (CMC) y la reunión de Ministros de Industria, Comercio y Servicios del Mercosur.
El Ministerio de Hacienda informó que Dujovne acompañará la agenda del presidente Macri, mientras que el ministerio de Producción informó que Sica tendrá reuniones bilaterales con su par de Industria y Comercio de Paraguay, Liz Rossana Cramer Campos, y el viceministro de Comercio Exterior y Asuntos Internacionales de Brasil, Marcos Troyjo.
Este miércoles, Dujovne, junto al presidente del Banco Central, Guido Sandleris, participará de la reunión de ministros de Economía y jefes del Banco Central de Mercosur y de la reunión con los presidentes.