Sobre el final de la campaña, Mauricio Macri cargó contra el kirchnerismo: “Ya fueron muchos años de dedito, atril y prepotencia”

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El presidente Mauricio Macri encabezó este martes un nuevo acto del “Sí, se puede” en Rosario, Santa Fe, y le pidió a la “mayoría silenciosa” que no se quede callada “mirando como se roban el futuro”.

“Sabemos que quieren que nos callemos todos los que pensamos distinto. Ya fueron muchos años de dedito, atril, prepotencia y de esa forma de ejercer el poder que rechazamos”, aseguró el Presidente ante una multitud convocada en el Parque España, en la ribera del río Paraná, en el centro histórico de la ciudad.

Acompañado por su esposa Juliana Awada y al candidato a vicepresidente Miguel Ángel Pichetto, Macri señaló que en el país existe una “mayoría silenciosa” que durante muchos años miró desde afuera la política y permitió que esos espacios fueran ocupados por aquellos que se creyeron los “dueños del país”.

“Dijeron que iban por todo y fueron por todo, hasta por nuestra libertad quisieron ir”, recordó. Luego, como hizo en casi todos los actos de la gira “Sí, se puede”, enumeró los valores que unen a las personas que apoyan al Gobierno, como la honestidad, el deseo de justicia, la lucha contra las mafias y el rechazo a la impunidad.

Al igual que el viernes en Jujuy, el líder de Juntos por el Cambio bromeó con un cartel que decía “Gato”. “A esta edad que me hayan agregado un nuevo apodo me gusta. ¿Cuántos gatos hay acá?”, preguntó a los presentes. La gente contestó con uno de los últimos cantitos surgidos durante la campaña: “Para rato, hay gato para rato, hay gato para rato”.

Por otro lado, el Presidente reconoció las dificultades económicas que atraviesa el país y señaló que los problemas estructurales habían resultado “más profundos” de los que habían anticipado cuando Cambiemos asumió el gobierno.

“Pero demostramos que se puede gobernar sin necesidad de meter el miedo o los odios de por medio. Podemos dialogar todos sentados en una mesa y crear condiciones para generar trabajo. También demostramos que podemos tener una política social sin clientelismo y que podemos hacer obras por todo el país sin corrupción”, argumentó en alusión al kirchnerismo.

Minutos después, por segunda vez en la última semana, Juliana Awada tomó el micrófono para agradecer “el cariño” de la gente. “Vamos Argentina”, arengó. Macri bromeó con que su intervención fue demasiado breve: “Fue un debut cortito, pero siempre por un lugar se empieza”.

Finalmente, el Presidente le pidió a sus simpatizantes que salgan a convencer a familiares y amigos, que colaboren con la fiscalización de los votos y que acompañen a los adultos mayores a votar. “Esta elección tiene que ser la de mayor asistencia de la democracia moderna, tienen que explotar las urnas de votos”, dijo.

La caravana del “Sí, se puede” comenzó el 28 de septiembre en el barrio porteño de Belgrano y viene recorriendo todo el país como parte de la campaña electoral que concluye este viernes a las 8, cuando comenzará la veda electoral con miras a los comicios generales del domingo.