Avanza la negociación entre las provincias y la Casa Rosada en torno al presupuesto 2019. Macri sumaría a Rosario en el reparto de 12 mil millones para compensar la quita de subsidios si Santa Fe suscribe la agenda tributaria.
El gobierno nacional condicionó nuevos aportes al transporte urbano de Rosario y Santa Fe para compensar la quita de subsidios al sistema a que el gobernador Miguel Lifschitz firme el nuevo pacto fiscal. Desde Cambiemos plantearon que, de suscribir la Casa Gris la agenda tributaria, las principales ciudades de la provincia serán incluidas dentro del reparto de un fondo de unos 12 mil millones de pesos. Y además habrá compensaciones adicionales vía aumento de impuestos nacionales que se coparticiparán, como el de bienes personales para propiedades de argentinos declaradas en el exterior.
La oferta del macrismo se conoció el mismo día que la intendenta Mónica Fein encabezó una reunión con los líderes de los distintos bloques del Concejo para debatir el impacto en el transporte de la quita de subsidios.
También se analizó la instrumentación de la emergencia social que aprobó semanas atrás el cuerpo, el impacto que tiene la crisis en cada uno de los barrios y cómo abordarla integralmente entre todos los niveles del Estado.
“Hemos tratado el tema del transporte, donde se dejarían de enviar más de 1.500 millones. Hemos hablado de procurar que la Nación no recorte ese recurso y también dialogar con la provincia para fortalecer los recursos de la ciudad, que es la que enfrenta todos los días la crisis, los problemas, y la demanda de los ciudadanos”, destacó Fein.
Esta semana Lifschitz ratificó que por ahora Santa Fe no suscribirá el nuevo pacto federal. El gobernador impugnó la eliminación del fondo sojero, el recorte de gasto social y en obras públicas, el aumento de la presión tributaria y la eliminación abrupta de los subsidios nacionales al transporte y de la tarifa eléctrica social.
En las últimas horas, desde Nación tendieron puentes con la administración del Frente Progresista. Y elevaron una propuesta de más fondos para el transporte de las principales ciudades de la provincia.
Pero la condicionaron a que Lifschitz firme la adenda y se sume a la casi totalidad de gobernadores que ya lo hicieron. “Con la particularidad de que Lifschitz no tiene ningún legislador nacional en el Congreso que lo represente para negociar en su nombre”, advirtieron.
La propuesta de la Casa Rosada incluye flexibilizar el pacto fiscal 2017 que exigía bajar el impuesto provincial a los sellos.
Y recibir fondos coparticipables de la suba de bienes personales de propiedades de argentinos en el exterior, el impuesto a las ganancias a cooperativas y mutuales, y la suspensión del pago del impuesto al cheque a cuenta de otros tributos.
También “se restablecería el fondo sojero mitad para la provincia y mitad para los municipios”. Como no alcanza esa masa para cubrir el ajuste federal se sumará un fondo nacional de unos 12 mil millones de pesos anuales a repartir entre las principales ciudades del país.
Por lo bajo, el macrismo también apuesta a que Lifschitz “baje el tono de las críticas públicas” al gobierno y al presidente.
Según los operadores santafesinos de Cambiemos, de acordar Nación y Santa Fe el nuevo pacto federal “el transporte de Rosario recibirá recursos como para no tener complicaciones adicionales en un escenario complejo”.
El recorte que mencionó Fein para los colectivos urbanos, unos 1.500 millones que dejarían de llegar al sistema urbano justo cuando debe empezar a implementarse progresivamente el nuevo esquema de recorridos, impactaría fuerte en el boleto. Tanto que pasaría de tener un costo real de $20 a rondar los $40.
Fein destacó al finalizar la reunión con los ediles: “Estamos trabajando en mantener el empleo, conteniendo lo social, aumentando los recursos en salud. Vi un compromiso de todos los bloques para trabajar juntos en la emergencia social y obviamente en todo lo que es la seguridad de la ciudad, y en los recursos que necesitamos para que esto se cumpla”.
Eduardo Toniolli / Concejal justicialista: “De hacerse efectiva la decisión de Macri, el 1º de enero de 2019 Rosario se queda sin transporte, dejando a pie a miles de usuarios, y demoliendo la economía”.
Roy López Molina / Concejal Cambiemos: “No vamos a resolver los problemas de Rosario a nivel de seguridad, transporte u obra pública si siempre la culpa de lo que pasa en la ciudad la tiene otro”.
Horacio Ghirardi / Concejal Partido Socialista: “La crisis económica y social que atraviesa el país exige el trabajo coordinado y conjunto entre los distintos niveles del gobierno para poder aliviar el impacto”
Roberto Sukerman / Concejal justicialista: “Estamos preocupados. Esto no tiene que quedar en una reunión, o en una foto. Tenemos que defender a Rosario y evitar que nos sigan sacando recursos”.
Fernanda Gigliani / Concejala Iniciativa Popular: “En enero la situación será crítica. Habrá que pagar sueldos y mil millones de pesos menos que Nación ya no enviará al transporte de la ciudad de Rosario”.