El homicidio sucedió anoche en Callao 2671 de Rosario y la víctima fue identificada como Rosa Adela Zorico, de 82 años, quien sufrió al menos 20 heridas punzantes en todo el cuerpo.
Fuentes de la investigación indicaron que el asesinato de Rosa se descubrió minutos antes de la medianoche cuando su hijo Andrés C. se comunicó con la policía para manifestar que en ropero de su vivienda tenía a su madre sin vida. El hombre le dijo a la policía que a su madre la habrían matado unos narcos.
Ante semejante novedad, los efectivos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) se pusieron en contacto con el fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos en turno, Alejandro Ferlazzo, quien ordenó que una comisión de ese organismo junto a personal de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) se presente en Callao 2671.
Una vez en ese domicilio, Andrés C. accedió a que la policía ingrese a su casa y preventivamente fue reducido por los efectivos. Enseguida, el personal policial realizó una requisa o revisión de toda la casa y así, en el interior de un ropero ubicado en uno de los dormitorio, los agentes encontraron el cadáver de Rosar Zorico. De inmediato se iniciaron toda las tareas de rigor para investigar los pormenores del crimen.
Fue en ese momento, y cuando ya eran más de la 1.30 de la madrugada, en que Andrés C. declaró espontáneamente ante la policía en ese lugar que la persona que mató a su madre a puñaladas había sido un amigo suyo, pero que él mismo la remató. Ante esa manifestación del sospechoso, el fiscal Ferlazzo ordenó su detención.