La víctima lo agarró “in fraganti” cuando estaba cargando 600 litros de combustible en tres tachos.
En un campo de la localidad de Susana, un hombre de 30 años encontró que su empleado y un cómplice le estaban robando combustible de un depósito. Al llegar a lugar, halló a los denunciados con 3 tachos de 200 litros cada uno arriba de una camioneta cargados con gasoil. Por lo que llamó a la policía. El empleado, dueño de la camioneta, se quedó en el lugar, mientras que su cómplice huyó corriendo. El patrón, ya venía sospechando de este tipo de maniobras.