UNO SANTA FE
Frente al Puerto registró este lunes al mediodía 1,78 metros. El nivel más alto de este año fue el 31 de enero con 5,32 metros, alcanzando el nivel de alerta.
Este lunes al mediodía el río Paraná alcanzó una altura de 1,78 metros en el puerto de Santa Fe, la más baja de este año y de la última década (desde 2009). Desde el viernes la Prefectura Naval comenzó a medir los niveles por debajo de los dos metros. La segunda medición más baja del 2019 fue el 9 de septiembre con 1,97 metros, y la más alta alcanzó el nivel de alerta con 5,32 metros el 31 de enero
UNO Santa Fe consultó a Luis Dopazo, responsable de hidrometeorología del Instituto Nacional del Agua en la región litoral. “En este momento es lo más bajo que estuvo este año. Hay registros menores por supuesto, pero hay que remitirse una década atrás. El histórico es el 30 de septiembre de 1944 que tenemos que hablar de números negativos, con 93 centímetros por debajo del cero. Se trata del siglo pasado, cuando la composición de la cuenca del río Paraná era totalmente distinta a lo que es ahora, porque estaba prácticamente virgen sin la intervención del ser humano. No era como ahora con represas, cultivos, selvas deforestadas. Así que no podemos comparar con ese momento, pero es la mínima histórica en nuestro puerto“, recordó el especialista
En relación a las bajantes históricas del río Paraná en el puerto Santa Fe, según los registros del Centro de Informaciones Meteorológicas de la UNL, se destaca 2009 con 1,53 metros como la medida más baja de este siglo; y le sigue el 2001 con 1,60 metros; y el 2000 con 1,82 metros, al igual que hoy. En la última década, otros puntos bajos fueron en 2018 con 1,86 metros; 2012 con 1,99 metros; 2013 con 2 metros; y 2010, 2014, 2015, 2016 y 2017 con mínimas que no superaron los 2,67 metros.
Comportamiento
Cabe destacar que según las explicaciones de Dopazo, el año hidrológico del río Paraná consiste en el comienzo de las crecidas a partir de septiembre, luego sube y alcanza su pico en marzo o abril y desciende hasta agosto que vuelve a aumentar la cuenca. “A veces se corre unos meses los mínimos, como en octubre o en noviembre y los máximos en algunos años han sido en mayo o junio. El río es algo vivo y no matemático”, agrega.