Aunque la mayoría ve con preocupación y como un signo de debilidad el acercamiento al FMI, el Gobierno busca generar una percepción distinta. Así lo dejó claro el ministro de Finanzas, Luis Caputo, en una entrevista exclusiva con Infobae. “Fuimos al Fondo porque estamos con una economía sólida y es mejor negociar cuando estamos creciendo y con USD 55.000 millones de reservas”. Y al mismo tiempo procuró borrar la imagen de “cuco” que tiene el organismo. “No nos tenemos que mentir más. Los males de la Argentina los provocaron las malas políticas que implementamos en los últimos 70 años, no busquemos un complot internacional“.
Pero se advierte que el mayor interés del funcionario es llevar tranquilidad respecto a las consecuencias que tendrá un acercamiento con el organismo: “Nos va a permitir mantener el gradualismo que venimos llevando adelante. Pero además para la gente significa que por ejemplo los créditos hipotecarios o los planes sociales se podrán mantener. Ya no precisamos depender de la situación de los mercados y además ya no estaremos buscando financiamiento interno, con lo que les daremos más espacio a los privados”.