El Gobierno nacional autorizó el desarrollo de reuniones y celebraciones religiosas en iglesias, templos y lugares de culto en todo el territorio de la provincia de Santa Fe, con concurrencia simultánea permitida de más de 30 personas, sea al aire libre o en lugares cerrados.
Así lo indica un decreto publicado en el Boletín Oficial, firmado por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro de Salud, Ginés González García.
Ahora la decisión para el efectivo cumplimiento de la norma pasó a la esfera provincial, que deberá establecer la fecha en que comenzarán a regir las nuevas condiciones.
La autorización nacional, en rigor, implica exceptuar a la provincia de Santa Fe “de las prohibiciones dispuestas en el artículo 8°, incisos 1 y 2 del Decreto número 956/20”, que refiere al desarrollo de esas reuniones y celebraciones.
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En el caso de las celebraciones que se lleven a cabo en lugares cerrados, deberán tener “un aforo del 50%” del templo o lugar donde se lleven a cabo.
“Se deberá garantizar la organización de turnos, si correspondiere, y los modos de trabajo que garanticen las medidas de distanciamiento e higiene necesarias para disminuir el riesgo de contagio de Covid-19”, indica la norma.
Además, añade que la provincia “deberá dictar las reglamentaciones necesarias para el desarrollo de las actividades”, entre ellas las referidas a “la fecha para su efectiva reanudación, pudiendo implementarlas gradualmente, suspenderlas o reanudarlas, en el ámbito de su competencia territorial y conforme la situación sanitaria”.