DIARIO UNO
El presidente de la Nación anunció que enviará al Congreso un proyecto de ley para promover esa industria a través de la rebaja de impuestos
Subimos y bajamos escaleras, tomamos ascensores, abrimos puertas y miramos por las ventanas sin tomar conciencia de que todo eso que es parte de nuestra vida cotidiana alguna vez fue una obra en construcción: vigas, columnas de hormigón, bloques de acero, placas de vidrio, ladrillos. Y mucho menos solemos pensar en quién hizo posible que aquello que era un proyecto en un papel empezara a tomar forma y a levantarse literalmente de la nada. Hablo de los albañiles, los carpinteros, los pintores, los plomeros, los electricistas, los gasistas, los arquitectos, los ingenieros. Esos argentinos que todos los días salen a trabajar con ganas, con el entusiasmo y con el orgullo de saber que están poniendo su esfuerzo al servicio de algo mucho más grande. Aquellos que son parte de uno de los sectores que más oportunidades y trabajo genera en todo el país: la construcción.
Por el impulso productivo y el potencial que tiene la construcción, y dando respuesta a las demandas de uno de los tantos sectores con los que nos sentamos en una mesa a dialogar y trabajar juntos, creamos herramientas y beneficios para potenciarlo. Vamos a enviar al Congreso un proyecto de ley para allanarle el camino a todo el que quiera construir. Entre otras cosas, esta ley va a reducir sus impuestos –a las Ganancias, al cheque, al IVA– por dos años, y es una invitación a las provincias a que también reduzcan los impuestos que generan distorsiones.
Por Mauricio Macri, Presidente de la Nación. Exclusivo para La Capital