Ante el primer caso positivo en una industria en actividad, que obligó a paralizar cinco plantas con 200 empleados en total, se intensificaron en la mayoría de las empresas rafaelinas los controles sobre los protocolos de seguridad. Las más grandes ya piensan en dividir turnos y secciones para minimizar la posibilidad de contagios.

El viernes de la semana pasada, en una reunión que se realizó en el Salón Verde, el intendente Luis Castellano y el secretario de Producción, Diego Peiretti, se reunieron con representantes de la CGT, el CCIRR y el Ministerio de Trabajo de la Provincia, para escuchar la exposición de dos ejecutivos de la empresa Mahle, quienes expusieron sobre el protocolo de la multinacional alemana ante la emergencia provocada por el Covid y cómo se actuó ante la aparición de un caso positivo en un empleado de la planta de Garín. Todos coincidieron en que estos casos podían replicarse en cualquier momento en Rafaela y no hubo que esperar mucho: el lunes se confirmó un caso, el primero de la segunda oleada de Coronavirus en la ciudad, y justamente ese caso obligó a tomar medidas drásticas en cinco plantas industriales locales. Las mismas debieron paralizar su actividad durante martes y miércoles, en primer lugar para activar los protocolos de prevención, con la sanitización de los establecimientos; y en segundo lugar porque se verificaron 18 personas, entre trabajadores y personal ejecutivo, que debieron ser hisopadas, al ser consideradas como contactos estrechos o casos sospechosos. Se trata de cinco plantas de un mismo grupo empresario, en el que la persona que contrajo el Covid cumple funciones gerenciales. Si bien el hombre no estuvo en todas las plantas ni tuvo contactos con personas del ámbito laboral fuera de la planta principal, igualmente se habían adoptado esas medidas de precaución, en consenso con la autoridad sanitaria y con la UOM.
Ayer, en el reporte oficial de la situación del Coronavirus en Rafaela, el secretario de Producción del Municipio, Diego Peiretti, confirmó que las cinco plantas ya están trabajando normalmente, luego de una verificación completa de los aspectos de higiene y salud laboral. Las cuatro que son subsidiarias de la más importante abrieron ayer por la mañana, y la planta principal lo hizo en la tarde del jueves.
No obstante, Peretti indicó que «las 18 personas van a seguir en cuarentena y van a cumplir con los 14 días que les corresponde por la cuarentena obligatoria. Solamente se han reincorporado los demás trabajadores. Hicimos un trabajo en conjunto para cumplir con todos los requisitos que demanda el sistema de salud».
En relación al panorama general en la industria local, el funcionario reconoció que «esto ha disparado un alarma. Muchas empresas se han comunicado para saber si íbamos a retroceder de fase o los cuidados que deben tener las empresas ante la eventual aparición de un caso positivo entre sus empleados o alguien que tenga un contacto estrecho con un contagiado.
Ya comenzamos a generar reuniones para ver de qué manera debe actuarse en estos casos y a partir del trabajo que pudimos hacer se reforzó el diálogo con todos los empresarios. Se ha disparado una alarma que nos obliga a estar más atentos y reforzar los cuidados», insistió.

Nuevas medidas

Peiretti también reveló que en las empresas ya se está analizando cómo encarar esta nueva etapa de la pandemia, ante la chance concreta de que se multipliquen los casos de contagios en la ciudad. En ese sentido, el funcionario anticipó que hay industrias locales –se cree que las más importantes en cuanto a número de empleados y volumen productivo- que están revisando sus estrategias y su plan de trabajo.
En primer lugar, hay compañías que están haciendo un estudio de costos y de condiciones operativas para establecer una división de turnos, reimplanando la conformación de equipos de trabajo más reducidos, pero que puedan trabajar a lo largo de dos o tres turnos. Esto haría posible que, en caso de producirse un contagio, se pueda discontinuar la producción en un turno, sin afectar a los otros dos. «La idea, siempre –recalcó Peiretti- es que, si se produce un caso positivo en un trabajador o alguien que cumple funciones en una planta, se pueda retomar la producción lo más rápidamente posible». Esto significa que como sucedió en el caso de las cinco plantas mencionadas anteriormente, se pare un día o dos, se realicen las desinfecciones y verificaciones correspondientes, se aísle a los posibles contactos estrechos minimizando los riesgos de propagación de la enfermedad.
Otra medida que también se está tomando en las empresas que pueden hacerlo, es aislar las distintas secciones de trabajo entre sí, de modo que haya el menor intercambio posible entre trabajadores de una y otra sección, también con el fin de minimizar riesgos.
Finalmente, la otra cuestión que se está revisando en base a la evolución de la situación y las recomendaciones que van surgiendo a nivel nacional e internacional, es la entrada, salida y transporte de los trabajadores. Por ahora, todas las industrias de la ciudad trabajan normalmente, siempre ateniéndose a los protocolos dispuestos en cada caso.

Cuatro mil inspecciones

El ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Roberto Sukerman, se reunió con empresarios nucleados en APyME (Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios) Santa Fe, para analizar la marcha de las distintas actividades económicas, en el marco de la pandemia del Covid 19.
Sukerman recordó que el Gobierno Provincial, junto con municipios y comunas, realizó más de 4.000 operativos de inspección a empresas y comercios en todo el territorio provincial, «con el objetivo de verificar la correcta implementación de los protocolos de higiene y seguridad».
«Hoy más que nunca tenemos que redoblar el esfuerzo y ser muy estrictos en la aplicación de todas las normas de prevención en el trabajo, como lo expresó el gobernador Omar Perotti. Hay un cierto relajamiento en los cuidados que nos preocupa y eso se ve reflejado en el aumento de contagios», afirmó Sukerman.
Desde la cartera laboral, recordaron, además, que «en los espacios de trabajo está prohibida la reunión de personas durante los momentos de descanso, esparcimiento, comidas o cualquier otra actividad, que se realice sin el cumplimiento estricto de la distancia de dos metros entre trabajadores».
Además, remarcaron que «es responsabilidad de las y los empleadores adecuar los turnos de descanso para evitar la aglomeración de trabajadores; garantizar la debida distancia social; ventilar los ambientes con frecuencia; y realizar de forma periódica los controles de higiene dispuestos por las autoridades de Salud».
Asimismo, luego del encuentro con empresarios santafesinos, el Ministro de Trabajo aseguró que «estamos coordinando acciones con los sindicatos y las empresas, en relación con los programas de empleo de nuestro Ministerio, para conocer cuáles son las demandas de capacitación requeridas por el mercado laboral».